Ginebra: Posición 16 en nuestro ranking

Su relevancia internacional ayuda a que el nombre de Ginebra sea reconocido y familiar para todos. Esta ciudad de Suiza goza de una enorme relevancia entre extranjeros residentes, quienes han llegado a sumar incluso el 60% de la población.
En los resultados de la encuesta Ginebra queda en la posición 16 de la lista, pero tiene presencia en los top 10 de algunas categorías como nivel de seguridad, conexiones internacionales, educación y transporte público.
La importancia que tiene Ginebra para Europa, actuando como uno de los lugares más importantes de la ONU, ha llevado a que la ciudad obtenga una gran relevancia. En especial, Ginebra dedica gran parte de sus esfuerzos a reforzar la cultura en combinación con el desarrollo como ciudad de negocios.

El invierno en Ginebra es intenso, con bajas temperaturas y posibles precipitaciones, así como nieve. No obstante, también es una temporada en la que el paisaje de la región resulta atractivo y que compensa el frío a los residentes.
Sus veranos son templados como en otras partes del centro de Europa, con temperaturas máximas alcanzan niveles de unos 26 ºC. El clima se establece en un punto medio agradable que solo se ve afectado por la frecuente cantidad de lluvia. Este último aspecto ha sido el más penalizado por parte de los encuestados.

Ginebra obtiene la décima posición del ranking europeo de transporte público gracias a su combinación entre distintos tipos de forma de desplazamiento, como el autobús, tranvía, trolebús o sus característicos barcos con los que cruzar entre distintos puntos.
No hay metro, pero el tranvía cumple con esa función y cuenta con líneas y trenes muy modernos. De todas formas, el principal medio de transporte es el autobús, el cual dispone de un total de 65 líneas para cubrir gran parte del espacio de la ciudad.

Aunque en Ginebra los estudiantes pueden acabar los estudios obligatorios a los 15 años, hay una alta tasa de jóvenes que continúan sus estudios para llegar a tener formación universitaria.
Algunas de las principales universidades de Ginebra incluyen centros clásicos como la Universidad de Ginebrafundada en 1559 o la Escuela Internacional de Ginebra, que se fundó en 1924. También se encuentra en la ciudad el Collège Calvin, que tiene el título de ser uno de los colegios más antiguos del mundo.

Una de las ventajas principales de Ginebra en términos gastronómicos es que la ciudad reserva muchos secretos a quienes residen en ella y continúan descubriendo nuevos platos con el paso de los meses. Las salchichas forman parte de algunas de las recetas más populares, como la zervelatwurst o el papé Vaudois. También hay que destacar platos que tienen capacidad para gustar a todo tipo de personas, como el älplermagronen, una versión suiza de macarrones con queso y, no menos importante, no hay que olvidarse de los exquisitos postres preparados con chocolate suizo.

Aunque ya no es sede de las Naciones Unidas, papel que Ginebra tuvo entre los años 1920 y 1947, continúa teniendo una gran relevancia internacional. Además, la ONU utiliza el Palacio de las Naciones como lugar para realizar sus encuentros.
Una de sus grandes ventajas es que el aeropuerto, el cual es conocido con el nombre de Cointrin, se encuentra a solo 4 km desde la ciudad. Eso lo convierte en uno de los lugares preferidos por las aerolíneas para establecer sus bases y crear rutas internacionales, en especial a la vista de que cada año pasan por allí más de 10-15 millones de pasajeros. Por este motivo, se alza hasta la 6ª posición en el ranking de conexión internacional.

Ocupando el sexto puesto del top de ciudades más seguras de Europa según nuestros encuestados, se puede confirmar que Ginebra es uno de los lugares donde la vida resulta más tranquila. Los crímenes violentos son prácticamente inexistentes y ha sido así durante años.
No hay barrios que haya que evitar de noche ni nada parecido, como sí ocurre en otros destinos. Lo máximo de lo que hay que preocuparse es de los carteristas en zonas turísticas. Pero los residentes que suelen evitar esos lugares no tendrán muchos problemas.

Las acciones que está realizando Ginebra para ser sostenible se aprecian en distintos frentes y, sumándolas, tratan de marcar la diferencia. Aunque nuestros encuestados no han elegido la ciudad para estar en el top 10, sí que tiene algunas iniciativas que posiblemente mejorarán su imagen sostenible en el futuro..
En Ginebra se apoya el consumo sostenible, se fomentan ideas que ayuden a que el turismo sea lo más ecológico posible y reducen el impacto medioambiental por medio de métodos de transporte ecológicos, como el fomento de la bicicleta.

Es importante tener en cuenta a la hora de vivir en Ginebra, que los precios en la ciudad son realmente altos. Tanto el alojamiento como el pago de una escuela internacional donde puedan estudiar los niños resultan costes que impactan negativamente en la cartera de una manera alta.
La contraposición a esto, al menos, se encuentra en que se suele cuidar mucho la calidad. Por ejemplo, la comida no es barata, ni siquiera las verduras o las frutas, pero su sabor, calidad y estado merecen la pena la inversión. Por otro lado, los sueldos son altos.

Vivir en Ginebra significa tener una buena cantidad de museos, salas de teatro y de ópera, así como otros lugares interesantes en los que enriquecerse. Algunos de sus museos más famosos incluyen Museo de Arte e Historia de Ginebra, el Museo Rath y el Museo Ariana dedicado a la cerámica. Pero hay otros lugares que también aportan un buen toque cultural a la ciudad.
El Gran Teatro de Ginebra, que se inauguró en 1876, merece su visita al menos una vez al año. Hay multitud de eventos y celebraciones que invitan a disfrutar de este tipo de lugares culturales, por lo que nunca hay que olvidarse de ellos a lo largo del año.

Las fiestas de Ginebra, que se realizan en verano, simbolizan uno de los momentos de mayor importancia para los residentes, que salen a las calles para pasarlo bien y disfrutar de fuegos artificiales. También hay muchos festivales de música y otros lugares de disponibilidad permanente en los que pasar el fin de semana, como el Swiss Vapeur Parc, ideal para ir con niños.
Muchas de las actividades se realizan alrededor del lago de Ginebra, un sitio que tiene gran importancia en la región y que acaba convirtiéndose en uno de los principales puntos de encuentro. Pese a todo, el tamaño de la ciudad condiciona su oferta de ocio y palidece en comparación con otras ciudades de Europa, según las respuestas recogidas en encuestas.